El próximo 19 de octubre es el Día Internacional del Troll, que lejos de ser una celebración por algo positivo más bien nos convendría tenerlos vigilados.
Es normal si crees que esto no va contigo, pero si utilizas redes sociales (como seguro que haces), esto te interesa. Pero tranquilo, te vamos a definir a estos seres para que los identifiques y sepas como tratarlos en el mundo de fantasía de Internet.
Tan temidos como odiados, los trolls , no habitan en los bosques o grutas como su homónimo mitológico, estos se esconden detrás de un usuario anónimo y anidan en foros de Internet, espacios virtuales y redes sociales.
Lo que más les gusta es provocar. Para ello publican mensajes despectivos que se salen del tema a tratar solo por el mero hecho de molestar. Y molesta a cualquiera, ya sea persona o marca, y ahí tienen que salir tus dotes de community manager aunque no ejerzas de ello.
Tipos de trolls
Para celebrar su día te hacemos una lista con estos personajes para que conozcas a tu enemigo.
El fan incansable
Vamos a empezar por el más amable, ya que no todos los trolls son malvados. En este caso es un fan incondicional y persistente de tus publicaciones. Nunca está de más tener un admirador capaz de defenderte a ultranza frente a quien ose criticarte, aunque para ello tienes que aguantar cientos de comentarios en todo lo que hagas.
El hater
Seguimos con el más común. Odia todo y a todos. Y lo deja claro por medio de insultos y difamaciones contradiciendo a cualquiera y publicando difamaciones. Da igual lo que hagas, todo estará mal, así que recuerda: Nunca alimentes al troll
El spammer
Como su propio nombre indica: es un cansino. En este caso lo hace insertando enlaces sobre un tema de manera compulsiva, llegando a escribir decenas de mensajes seguidos con un mismo enlace con tal de conseguir tráfico a su web.
El desubicado
No sabe de lo que hablar, o más bien dónde lo dice. Puede que hable de la serie del momento en una blog de gastronomía. Lo que se dice: hablar por no estar callado. Porque tú o tu marca le dais igual, solo quiere hacerse notar.
El escéptico
A la hora de publicar algo es mejor que no tengas dudas, porque este tipo te va a cuestionar todo lo que digas y hagas. Desconfía de todo, hasta de las pruebas evidentes, hasta sabotea ganadores de concursos.
El cómico
Ármate de paciencia con su humor. Son inofensivos, más allá de sus chistes malos, aunque es cierto que pueden llegar a saturar. El humor es su herramienta y no hay mayor problema si no se llega a la ofensa.
El sabelotodo
Si tienes un cuñado ya sabes a lo que te enfrentas. Es el experto de cualquier cosa, algo que tienen que demostrar ante todos. Puede que no tenga ni idea del tema, pero siempre va a tener razón. Es insistente en sus correcciones a los demás y «sacarles» de dudas aunque sea con datos erróneos.
El profesor de lengua
¡Mucho ojito con poner faltas de ortografía! Es un talibán radical de la ortografía. No perderá la oportunidad de sacarte los colores en un sinfín de comentarios indicándote hasta la etimología del verbo que has empleado mal. Importa cómo escribes, no lo que dices.
El spoiler
Como amantes del buen cine y las series de calidad, gracias a Movistar y Netflix, a este troll le tenemos especial tirria. Solo busca fastidiar desvelando el final de las tramas trending topic del momento. Si eres un fan de verdad te abstraerás de leer comentarios.